Protocolo que el estamento arbitral, al igual que ha sucedido con la propia liga, ha actualizado recientemente. En el nuevo “modus operandi” ya no aparece la obligatoriedad de pasar este PCR.

El pasado 28 de diciembre adelantó Ramón Fuentes en MD el protocolo que el propio CTA puso en marcha a raíz de la aparición de la nueva variante de COVID.

Protocolo que pasaba por la obligación de todos los árbitros, designados para la jornada liguera o copa , de tener que pasar un test de PCR.

Un test que debían pasar en las 72 o 48 horas previas para el encuentro que sea designado. Una vez que tengan el resultado de mismo, será cuando lo tienen que remitir al CTA.

En caso de ser positivo, el estamento arbitral designará al árbitro que tenga previsto como suplente. Cabe recordar que, en caso extremo y de un brote elevado de COVID, podría llegar a darse el caso que un colegiado pudiera pitar a equipos de una misma Comunidad Autónoma. Medida que el CTA ya comunicó con motivo de la aparición de la pandemia en febrero del 2020.

Este PCR no solo tenían que pasarlo los árbitros de campo, también los asistentes o cuartos colegiados designados para los encuentros.

Por el contrario los árbitros, así como el resto de miembros del cuerpo arbitral convocados para el encuentro, deben pasar dos test de antígenos en las 48 horas previas a la celebración del encuentro.

El primero es dentro de estas 48 horas previas y el segundo deben llevarlo a cabo en la misma mañana del encuentro.

Unos test que los miembros del cuerpo arbitral pueden realizarlo en un laboratorio o bien pueden también realizarlo con los dispensados en farmacias. Un protocolo que ya está en marcha con motivo de esta jornada copera donde además empieza a utilizarse el VAR donde los citados a la Ciudad del Fútbol de las Rozas deben ejecutarlo también antes de acudir a la sala VOR .