El capitán José Luis Gayà, en declaraciones a VCF MEDIA que recoge Valencia Plaza, ha analizado lo sucedido en el partido de ayer entre el Valencia y Osasuna, correspondiente a la jornada 32 de LaLiga. El valencianista no se ha cortado y ha hablado también sobre las jugadas polémicas.

Respecto a las decisiones arbitrales, manifestó:

"Es la tónica que llevamos esta temporada. Le tienen que avisar de un penalti clarísimo. El árbitro lo ha visto y no ha querido pitarlo. Lucharemos contra todo y seguiremos adelante".

"Es lo de siempre. El árbitro, al descanso, nos ha dicho que si hubiera pitado el penalti sobre Bryan lo hubieran quitado desde el VAR porque no había contacto. Tampoco podemos decir nada porque te sacan amarilla como a mi al final del partido. Hacen lo que quieren".

Estas declaraciones se suman a las de su técnico, José Bordalás, tras el partido. El entrenador del Valencia se quejó tras la derrota de su equipo en Mestalla (1-2), del criterio del VAR en los partidos de su equipo e indicó que "parece que no funciona a favor del Valencia".

Pero por el tono de las declaraciones de Gayá, más duro que el de su técnico, es previsible que el departamento de Integridad de la RFEF acuerde denunciarlas ante Competición, a tenor de lo que establece el artículo 100 bis del Código Disciplinario, relativo a las declaraciones a través de cualquier medio sobre los miembros del colectivo arbitral o miembros de los órganos de garantías normativas.

Dicho precepto deja claro que puede ser sancionable “La realización por parte de cualquier persona sujeta a disciplina deportiva de declaraciones a través de cualquier medio mediante las que se cuestione la honradez e imparcialidad de cualquier miembro del colectivo arbitral o de los órganos de la RFEF; así como las declaraciones que supongan una desaprobación de la actividad de cualquier miembro de los colectivos mencionados cuando se efectúen con menosprecio o cuando se emplee un lenguaje ofensivo, insultante, humillante o malsonante, serán sancionados”.