A las 12.00 horas la concejala de Política Social y del Mayor, Jennifer Sosa, leyó el manifiesto de la FECAM para conmemorar el Día Internacional de La Mujer

El Ayuntamiento de La Aldea de San Nicolás ha querido mostrar este viernes su apoyo y compromiso con las políticas de igualdad y empoderamiento femenino con la lectura de un manifiesto con motivo de la conmemoración del Día Internacional de la Mujer, que se celebra cada 8 de marzo.

En el acto de la lectura de la declaración institucional, propuesta por la Federación Canaria de Municipios (FECAM), ha estado el alcalde, Víctor Hernández, el primer teniente de alcalde, Pedro Suárez, y una amplia representación de concejales y concejalas.

A las 12.00 horas era la concejala de Política Social y del Mayor de La Aldea de San Nicolás, Jennifer Sosa, la que leía el manifiesto en el que se ponía en valor la importancia de defender y abogar por los derechos y la igualdad de todas las mujeres.

Así, y bajo el lema “Por la igualdad real entre mujeres y hombres, por principios, por justicia y como derecho fundamental”, los aldeanos y aldeanas se concentraron frente a las puertas del ayuntamiento para pedir se impulsen soluciones concretas que promuevan la igualdad real de oportunidades entre hombres y mujeres, erradiquen la brecha salarial y el permanente techo de cristal al que se enfrentan las mujeres para acceder a puestos de alta responsabilidad.

En este sentido, la concejal de Política Social y del Mayor, Jennifer Sosa, ha apuntado que “hoy es un día para reflexionar sobre los avances logrados, pero también sobre los retos y desafíos a los que aún nos enfrentamos en la búsqueda de un mundo más igualitario”.

“Nos comprometemos a seguir trabajando desde el ayuntamiento para crear políticas inclusivas que promuevan la equidad y eliminen las barreras que enfrentan las mujeres en nuestra sociedad y en nuestro municipio”, ha señalado Sosa, quien ha recordado que “se han logrado importantes avances, pero aún queda mucho camino por recorrer para alcanzar la igualdad real”.

La organización FADEMUR visibiliza la agenda feminista rural por la que hoy salen a las calles las mujeres rurales

En un sector como el agrario, estratégico para toda la sociedad y emblemático para los pueblos, las mujeres con contratos indefinidos ganaron en 2023 un 3,2% menos que los hombres, una brecha que escaló hasta el 7,6% en el caso de las mujeres y hombres con contratos temporales.

Esta es solo una de las denuncias que ponen sobre la mesa hoy, Día Internacional de las Mujeres, aquellas que viven y trabajan en los pueblos, entre 3 y 5 millones en España. La diferencia entre una cantidad y otra viene dada por la vara de medir que se utilice para considerar o no rurales los municipios y núcleos poblacionales menores, como las parroquias y las pedanías. “Esto ya nos aporta una pista de cómo es el terreno en el que trabajamos: poco observado y menos estudiado. En definitiva, muy ignorado”, dice Teresa López López, presidenta de FADEMUR, Federación de Asociaciones de Mujeres Rurales, explicando la doble discriminación que sufren: por sexo y territorio.

Desde FADEMUR apuntan más cifras de la desigualdad laboral entre hombres y mujeres del campo. Ellas tienen menos explotaciones agrarias -un 36% menos que los hombres- y la brecha es incluso mayor cuando hablamos de titulares que son jefes de explotación: en esta figura los hombres suponen casi un 49% más que las mujeres. Además, las explotaciones de mujeres son más pequeñas y menos rentables. El Ministerio de Agricultura reconoce que tienen una dimensión económica casi un 40% menor que la media nacional, lo que las hace más vulnerables ante crisis como la actual y repercute en su independencia económica.

Pero la desigualdad sobrepasa el sector agrario. Las mujeres sufren en los pueblos una fuerte segregación vertical y horizontal laboral en todo el medio rural. En conjunto, las mujeres en los pueblos sufrían una tasa de inactividad laboral del 29,6% en 2021, frente al 12% de inactividad de los hombres. Y si centramos la mirada en el empresariado rural, también es notable su masculinización. Del total de personas empresarias en los pueblos, los datos de 2021 hablando de un 68% de hombres frente a un 32% de mujeres.

Derechos reproductivos y violencia machista

Desde FADEMUR denuncian que son notables los problemas para ejercer el derecho al aborto en los pueblos. “Sin centros cercanos ni líneas de transporte público, en el medio rural las garantías de acceder a un aborto y de hacerlo de forma anónima se ven muy reducidas”, explica la presidenta de FADEMUR.

Detrás de la falta de transporte y otros servicios, la excusa de que la población rural es menor y está más dispersa. “Es también la razón que nos dan para retirarnos otros servicios”, explica Teresa señalando otra consecuencia muy dura: “las mujeres de los pueblos son muy vulnerables ante la violencia machista porque los recursos de prevención y atención también están concentrados en las ciudades”. Las víctimas rurales permanecen con sus agresores de media 20 años, según el primer –y único hasta la fecha- estudio sobre violencia machista en el medio rural de España

En FADEMUR, hartas de ver ignorada por la Administración su petición de segregar por tamaño de municipio los asesinatos por violencia machista, comenzaron a registrar ellas mismas los datos en 2021. De las 5 víctimas oficiales en lo que llevamos de año, 2 fueron asesinadas en municipios de menos de 20.000 habitantes. Entre 2021 y 2023, en España fueron asesinadas 149 mujeres, de las que 48 fueron asesinadas en pueblos.

Otras desigualdades

La discriminación y desigualdad por razón de sexo se extienden a todas las esferas en el medio rural, la brecha desde las tareas domésticas y cuidados de personas del entorno hasta la digitalización.

En el cuidado de la infancia, por ejemplo, los últimos datos hablan de que ellas dedican casi 5 horas y media mientras que los hombres rurales sobrepasan a duras penas las 2 horas.

En cuanto al uso de tecnologías, las mujeres suponen el 42,4% de las personas que las utilizan en los pueblos y los hombres el 57,6%. Desde FADEMUR han remarcado la necesidad de seguir ahondando en el conocimiento de estas y otras brechas sufridas por las mujeres en el ámbito rural. Según Teresa López, “Es la única manera de ir reduciéndolas”.

Reivindicaciones y visibilización

FADEMUR ha remarcado que la lucha contra estas desigualdades sobrepasa el 8 de marzo y ha puesto en valor su trabajo durante todo el año. Así, ha destacado su lanzadera de emprendedoras Ruraltivity o en el programa Plan Allen Rural para mejorar la situación laboral de las mujeres rurales; también los esfuerzos desde ‘Cultivando Igualdad’ para erradicar la violencia machista en los pueblos; o programas como ‘Cuidándonos para un Futuro Mejor’ para aliviar los trabajos de cuidado informal de personas mayores.

“Pero no podemos avanzar solas, necesitamos un respaldo y recursos por parte de las Administraciones”, ha explicado la presidenta destacando el diferente apoyo que las mujeres viven según el territorio en el que se ubiquen sus pueblos. “Nos preocupa las diferentes velocidades a las que avanza la igualdad en toda España, mientras en algunos territorios disponemos de un Estatuto, en otros estamos viendo pasos hacia atrás”.

Para luchar contra esto, la organización demanda la aprobación de un Estatuto que sirva de paraguas para todas independientemente de la región y el color del partido que gobierne. FADEMUR pide que este Estatuto de las Mujeres Rurales recoja, al menos, cinco puntos mínimos que garanticen un avance en las desigualdades en los pueblos:

1. Que asegure que todos los Gobiernos autonómicos llevan a pie de campo la PAC que busca la igualdad.

2. Que facilite la Titularidad Compartida para continuar visibilizando el trabajo de las mujeres del sector agrario. Las diferencias en el número de explotaciones con esta figura jurídica son muy notables entre algunas regiones (la C. de Madrid e Islas Baleares continúan teniendo 0 explotaciones en su registro) y es un claro ejemplo de los desequilibrios del mundo rural en materia de igualdad.

3. Que profesionalice los cuidados, que las mujeres que los ejerzan obtengan una remuneración y vean reconocidos sus derechos, a la vez que dé garantías de que los servicios llegan a las y los habitantes de los pueblos.

4. Que mejore la participación de las mujeres rurales en la esfera pública y privada, para lo que FADEMUR propone tomar el ejemplo del Estatuto de las Mujeres Rurales que ya existe en Castilla-La Mancha, el cual vincula la obtención de presupuesto público a la participación equilibrada de las mujeres en las entidades.

5. Que dedique más atención y recursos para evitar la violencia machista en los pueblos, que ayude a extender la red de espacios seguros contra esta lacra y que impulse la sensibilización del conjunto de la sociedad y las empresas.

Por todo ello, las mujeres de salen hoy a las calles, en muchas ocasiones, de las ciudades. “Quien piense que las mujeres rurales se quedan en casa el 8M se equivoca, pero es común que acudamos a las grandes urbes a engrosar las movilizaciones que en ellas se convocan”, ha explicado Teresa López.

Para visibilizar la participación de las mujeres rurales, y su agenda, en estas protestas, este año FADEMUR ha repartido pegatinas en las que las manifestantes escriben los nombres de sus pueblos para reflejar así “la fuerza del y unidad del 8M rural”.

Recortes Cero ha acudido a las manifestaciones del 8M en Tenerife, Gran Canaria y La Palma reivindicando la unidad del movimiento feminista. Angustias Rodríguez, portavoz de Recortes Cero en Canarias ha asegurado al llegar a la manifestación que ‘cada vez que las mujeres nos enfrentamos o se produce alguna división, somos más débiles frente a la violencia machista’. Según Angustias ‘quien nos quiere calladas, primero nos quiere divididas’

TenerifeEn el comunicado que han hecho público desde Recortes Cero se denuncia la situación que viven las trabajadoras, ‘que son las que más están sufriendo el atraco de la inflación y la estafa del euribor’. Para Recortes Cero, ‘una de las principales medidas feministas que necesita nuestra sociedad es la igualdad salarial, pero no a la baja, sino para que nadie cobre menos de 1.300 euros’. Recortes Cero, que hace tres semanas anunció que se presentará a las Elecciones Europeas, defiende la necesidad de redistribuir la riqueza, ‘poniendo techos salariales’.

La portavoz estatal Nuria Suárez, ha asegurado durante la jornada que ‘los techos salariales no pueden ser una reflexión sino una exigencia a la que se sume la mayoría de la sociedad, porque son un pequeño y reducido grupo de privilegiados los que cobran sueldos por encima de 15, 20 o 50 mil euros al mes’.

Acabar con la brecha salarial, que es de un 20% en estos momentos, ‘no solo sirve para mejorar la vida de quienes más sufrimos la precariedad que somos las mujeres, sino que debe servir para mejorar la de la mayoría’.

A lo largo de la manifestación, Recortes Cero ha desplegado mensajes exigiendo el Alto el Fuego en Gaza y la retirada de las tropas rusas de Ucrania, con el lema ‘Todas somos palestinas. Todas somos ucranianas’.

La portavoz de Recortes Cero en Canarias, Angustias, ha recordad que para acabar con la violencia machista (‘Violencia Machista Cero’ en sus carteles), ‘es necesario incrementar la inversión en formación, profesionales, acompañamiento, pisos de acogida, prevención y empleos que aseguren la independencia a las mujeres que denuncian y dependen económicamente del maltratador’. Desde Recortes Cero se denuncia que ‘bancos y monopolios estén presentando cifras récord de beneficios y luego faltan recursos para lo importante, como salvar vidas de mujeres o acompañarlas para que se atrevan a denunciar’.