Se trata de la cuarta campaña de intervenciones arqueológicas financiada por la Dirección General de Patrimonio Cultural

El suelo de ocupación aborigen localizado se encuentra dentro de una estructura de planta circular

La Dirección General de Patrimonio Cultural impulsa una cuarta campaña de excavaciones arqueológicas en el yacimiento del Lomo Los Melones con el objetivo de identificar suelo de ocupación aborigen en la zona sur del poblado costero de Telde. Con el proyecto de investigación dirigido por Abel Galindo, de la empresa especializada Arkéos Arqueología, se pretende documentar la funcionalidad de las diferentes estructuras arqueológicas conservadas en este enclave único de Gran Canaria.

La isla de Gran Canaria cuenta con multitud de poblados costeros aborígenes, sin embargo, a pesar de que estos yacimientos son muy semejantes en morfología y estructura, el de Lomo Los Melones se diferencia por sus características funcionales concretas. En este yacimiento se han localizado estructuras arqueosedimentarias que indican que la sociedad preeuropea solo procesaba alimentos en una de las estructuras, en cambio el resto de poblados del litoral también eran utilizados como zona de habitación.

El conjunto arqueológico de Telde, datado entre los siglos XIII y XV, se compone de tres restos estructurales que, según el equipo de especialistas, una se utilizaba para el procesado de alimentos cárnicos de origen terrestre y marino como evidencian los restos de lapas, cabra, etc., además de otra para el proceso culinario de algunos de esos alimentos, materializado en nueve hogares y fragmentos cerámicos de platos y bandejas.

Nueva campaña

Ahora bien, esta nueva campaña se ha centrado en la identificación de suelo de ocupación en posición primaria en la denominada E3, una construcción de planta circular situada en la zona sur del yacimiento arqueológico que hasta ahora no había sido intervenida en profundidad.

Lo más destacado de la intervención es que se ha podido «constatar fehacientemente la existencia de nuevas estructuras arqueosedimentarias así como, al menos, un foco de combustión acotado con diferentes piedras”, adelanta Galindo, “ahora hay que documentar su morfología y extensión para comprender su relación estratigráfica con el resto del suelo de ocupación”, concluye.

Con respecto a los vestigios, se ha verificado la presencia de suelos ricos en elementos artefactuales principalmente de naturaleza cerámica y lítica, y ecofactuales como moluscos y fáunicos. Sin embargo, no queda clara la funcionalidad de la E3 hasta el momento, “si se trataba de un espacio de habitación, de procesado de alimentos o de cocina, lo sabremos tras los estudios de los materiales recuperados”, sostiene el arqueólogo.

Tras las campañas de 2018, 2019, 2020 y ahora en 2023, la Dirección General de Patrimonio Cultural da continuidad al proyecto de investigación en el Lomo Los Melones por ser un conjunto arqueológico referente dentro de las investigaciones científicas sobre la vida de la población indígena costera. De hecho, este proyecto de investigación evidenció, por primera vez en un contexto arqueológico primario de Gran Canaria, la presencia de un gato datado en el siglo XIV.

La investigación arqueológica ha localizado suelo de ocupación aborigen en el interior de la casa honda

Las dataciones podrían indicar que Lanzarote se encontraba ocupada en su totalidad durante el siglo VII

La Dirección General de Patrimonio Cultural ha localizado suelo de ocupación aborigen en el yacimiento de la Cueva del Majo en La Degollada (Yaiza), una casa honda dentro de un tubo volcánico que ha sido datada entre los siglos VII y VIII de la era común. El estudio de los materiales recuperados como piezas óseas, cerámicas y líticas, entre otras, evidencian que este enclave poseía una fuerte adscripción cultural desde la época preeuropea hasta la actualidad.

Esta mañana, la directora general de Patrimonio Cultural, Nona Perera, dio a conocer los detalles de la segunda campaña de este proyecto a los medios de comunicación, acompañada por el alcalde del Ayuntamiento de Yaiza, Óscar Noda, la concejala de Patrimonio, Silvia Santana, y el arqueólogo y director de la intervención arqueológica, Jesús Cáceres.

Este proyecto es muy importante “para conocer en la historia completa de Lanzarote ya que advertimos que la investigación arqueológica está concentrada en el norte de la isla”, declaró Perera. Con estos trabajos se amplía la búsqueda de “la presencia aborigen en la totalidad del territorio y se equilibran los estudios”, sostuvo.

El alcalde dio la enhorabuena al equipo de trabajo y a las asociaciones implicadas en este proyecto. Además, aprovechó el acto para agradecer “que se desarrollen este tipo de intervenciones en el municipio”, necesarias para entender el pasado de Yaiza.

Ahora bien, para contextualizar este yacimiento arqueológico, la empresa Tegue, arqueología y gestión de patrimonio dató uno de los materiales óseos humanos localizados en una de la unidades estratigráficas, exactamente un incisivo inferior, a través del muestreo de Carbono 14.

Se trata de la primera vez que se realiza una intervención arqueológica en una cavidad de estas características en el sur de la isla, “por lo que ha servido como comparativa a otros yacimientos similares como el Poblado de Zonzamas y la Peña de las Cucharas”, explicó Cáceres. De hecho, la importancia de la datación de la Cueva del Majo se debe a que los otros dos contextos arqueológicos del norte de Lanzarote tienen la misma cronología, lo que puede indicar que Lanzarote se encontraba ocupada en el norte y en el sur durante los siglos VII y VIII, según el equipo de arqueología compuesto por Jesús Cáceres y Joachim Ehrenhöfer.

Estudio integral

El proyecto, que cuenta con el aval científico de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, recoge un estudio integral del Valle de Fenausu en el que se incluye una revisión documental del archivo de Yaiza, la prospección arqueológica con la realización de sondeos en algunas casas hondas de La Degollada así como la difusión de los trabajos realizados al público general y la comunidad científica.

Los materiales localizados en el interior de la cavidad y en sus alrededores, a través de una excavación arqueológica, “han sacado a la luz gran cantidad de datos sobre la vida cotidiana de la población maja dentro de un espacio habitacional”, adelanta el arqueólogo.

En los exteriores de la casa honda se registran piezas óseas de fauna trabajadas, malacofauna antigua y cuatro dientes humanos, dos de ellos unidos por un fragmento de mandíbula inferior, que corresponden con uno de los incisivos analizados, dos premolares y un molar. Con respecto al tubo volcánico, existe un suelo de ocupación arcilloso con una granulometría fina, donde se documentan materiales cerámicos a mano, malacofauna, líticos y presencia muy diluida de ceniza de fuego.

La Dirección General de Patrimonio Cultural pretende con esta investigación denominada ‘Valle de Fenauso, usos y costumbres territorial de época preeuropea hasta la actualidad’ ampliar el conocimiento sobre el pasado de Lanzarote y atender así, a la demandada ciudadana de la Asociación de Vecinos Los Mahos de La Degollada de conocer la historia de su pueblo.

Se busca afianzar los estudios cronológicos, que parecen sucederse en este territorio, con veinte nuevas dataciones radiocarbónicas en ámbitos domésticos, funerarios y rituales

El yacimiento de La Fortaleza es un enclave largamente conocido en la tradición arqueológica de Gran Canaria. Desde el último tercio del siglo XIX va a ser visitado por importantes investigadores tanto locales como foráneos, que desde muy temprano ponen de manifiesto la importancia del sitio.

Se trata de uno de los asentamientos de referencia aborigen más importante de la isla de Gran Canaria por su dilatada ocupación y elevado volumen de testimonios arqueológicos que conserva. Esta situación deviene de una intensa labor de investigación que se viene desarrollando desde hace algunos años con el objeto de profundizar en las condiciones de vida de las poblaciones que allí habitaron.

La Dirección General de Patrimonio Cultural del Gobierno de Canarias, a través Instituto Canario de Desarrollo Cultural, ha realizado veinte nuevas dataciones del yacimiento. Las muestras provienen de diversos contextos y espacios arqueológicos previamente documentados, permitiendo ahondar en el conocimiento de este espacio patrimonial. Las dataciones han sido enviadas al laboratorio de AMS (EEUU), realizándose, además, las mediciones de la relación entre Carbono y Nitrógeno, ya que esto permite verificar su validez, corroborando los trabajos realizados anteriormente, diferenciándose espacios por su antigüedad, como por ejemplo la cima, frente a otros espacios, como el poblado de estructuras habitacionales, ubicado en la ladera oeste de La Fortaleza Grande, que parece tener dos momentos de ocupación diferentes.

Análisis del tiempo

El yacimiento dispone en la actualidad de más de ochenta dataciones, posicionándolo como el espacio arqueológico con mayor número de ciclo corto de Canarias. Este hecho ayuda a establecer el relato histórico de al menos 1200 años de historia de ocupación, plasmando la diversidad y complejidad de las dinámicas socioculturales que afectan al conjunto del territorio insular.

Dentro de esta labor investigadora, recientemente se ha prestado especial atención al análisis del tiempo. Se cuenta, de forma previa, con 58 dataciones radiocarbónicas derivadas de las diferentes campañas de intervención, así como proyectos específicos de encuadre cronológico de la Caldera de Tirajana y la zona del SE. Ahora, con las nuevas dataciones se consolida la caracterización de la presencia indígena en este enclave, haciendo especial hincapié en las diferentes tradiciones culturales que parecen sucederse. Con esta intención se han realizado las veinte nuevas dataciones radiocarbónicas de algunas de las manifestaciones más representativas de los ámbitos domésticos, funerarios y rituales, establecidos en la Fortaleza Grande.

En definitiva, a partir de esta información, ha sido posible crear un contexto cronológico amplio en el que quedan imbricadas todas estas manifestaciones, dando acceso al modelo de poblamiento que allí acontece a lo largo del tiempo.

La Fortaleza posee un valor histórico de primer orden, no solo referido al ocaso de la población aborigen frente a los castellanos como habitualmente se ha considerado, también el de ser un territorio que desde fechas muy tempranas las poblaciones afincadas a la isla eligen para vivir, manteniéndose allí hasta el final.

El Cabildo de Gran Canaria ha hecho posible, con una inversión de 290.225 euros de la Consejería de Presidencia y Patrimonio Histórico que dirige Teodoro Sosa, la intervención que se desarrolla en el Bien de Interés Cultural (BIC) Cenobio de Va-lerón, en Santa María de Guía, para, entre otros objetivos, devolver a su estado original el yacimiento arqueológico, así como recuperar las piezas que pudieron quedar enterradas debido a intervenciones anteriores. Una actuación con la que se pretende fomentar y potenciar los valores del que es el principal almacén prehispánico de la Isla

“Se trata de una de las intervenciones arqueológicas más importantes desarrolla-das en los últimos años en Gran Canaria, dada la especial significación del Ceno-bio de Valerón dentro del patrimonio arqueológico indígena, histórico y cultural de nuestro pueblo”, manifestó el presidente del Cabildo grancanario, Antonio Morales durante la visita que realizó hoy a la zona, en compañía del consejero de Presidencia y Patrimonio, Teodoro Sosa, y del director insular de Patrimonio His-tórico, Sebastián López, así como el alcalde de Guía, Pedro Rodríguez, y varios concejales y concejalas del municipio norteño.

Y es que el Cenobio de Valerón es uno de los yacimientos arqueológicos más em-blemáticos de Canarias, a la par que uno de los de mayor interés de Gran Canaria. Se trata de un lugar de almacenamiento, un impresionante granero fortificado realizado y utilizado por la antigua población de Gran Canaria hace más de 800 años, que fue declarado BIC en 1978.

Como explicó el presidente Morales, el Cenobio fue sometido a distintas inter-venciones a mitad del siglo pasado y, en los años 70, con el fin de facilitar su ac-ceso público y su uso turístico, se realizaron obras de acondicionamiento que, si bien facilitaron el disfrute de las y los visitantes, también implicaron la ocupación de parte del enclave, lo que incidió de forma negativa en la contemplación del Bien y comprometió la integridad de algunos de sus elementos.

“Fue una intervención muy dura, que supuso un enorme daño para el patrimo-nio”, remarcó el presidente insular. “Se trataba de un yacimiento abierto, fortifi-cado y, para hacer más fácil la accesibilidad a las personas que venían a visitarlo, se construyó una pasarela que invadió una gran parte del mismo”, detalló.

Subsanar esos daños es uno de los motivos por los que el Cabildo de Gran Cana-ria desarrolla esta iniciativa, que forma parte del programa de Inversiones para la Recuperación Social y Económica de Gran Canaria 2020 encaminadas a la Reno-vación de los centros de interpretación del Patrimonio Cultural de la Isla, y que dotó el Ayuntamiento de Santa María de Guía de una subvención de esos 290.225 euros para ejecutar el proyecto ‘Instalaciones, recursos, soportes y con-tenidos del Centro de Interpretación del Cenobio de Valerón’.

En concreto, en esta intervención se procederá a eliminar la plataforma por la que, actualmente, acceden las y los visitantes para contemplar el yacimiento desde su zona frontal, con el fin de recuperar la orografía original del enclave.

De forma paralela, se lleva a cabo una excavación encaminada a la recuperación, análisis y estudio de los materiales arqueológicos localizados en los rellenos que se utilizaron para construirla, puesto que las y los técnicos del Servicio insular de Patrimonio Histórico tienen constancia, por informaciones de personas que tra-bajaron en la construcción de dicha infraestructura, de que se usaron los depósi-tos arqueológicos del interior del granero y sus silos como material constructivo para ejecutar la obra.

El estudio de los restos arqueológicos asociados a los silos y cuevas del granero localizados en esos rellenos permiten acceder a una información de un enorme interés histórico, en aras de conocer las actividades desarrolladas por las comu-nidades prehispánicas en esta zona, de la que existe muy poca documentación arqueológica. “Todo lo que ha aparecido y lo que hay detrás de esta intervención, sin duda, nos lleva a confirmar que estamos ante uno de los grandes yacimientos que encierran la huella y el legado de los primeros pobladores de Gran Canaria y pasarán a formar parte del legado patrimonial de Gran Canaria”, apostilló Anto-nio Morales.

De este modo, la eliminación de la plataforma y la excavación arqueológica supo-nen recuperar la pendiente original y parte del yacimiento que quedó oculto bajo las obras realizadas en los 70, con lo que se restaura la integridad y la autentici-dad del Bien, y se mejoran sus condiciones de conservación.

Y, finalmente, se instalará una pasarela en voladizo, que afectarán mínimamente al suelo del yacimiento arqueológico y que abre el acceso al Cenobio. Esta estruc-tura quedará integrada en el actual diseño del Centro de Interpretación y se con-figurará como una estructura metálica con un pilar central y muros de apoyos laterales. Una pasarela que elimina el impacto visual que causa la plataforma edi-ficada en 1974 y que mejora la percepción, contemplación y disfrute público de uno de los graneros comunales fortificados más importantes de Gran Canaria y uno de los yacimientos arqueológicos más emblemáticos del Archipiélago.

Por su parte, Valentín Barroso, codirector de Arqueocanarias, empresa que ges-tiona el Cenobio de Valerón y que realiza los actuales trabajos arqueológicos, es-pecificó que esta nueva pasarela, que se prevé que estará instalada en tres o cua-tro meses, hará posible que las y los visitantes aprecien el precipicio sobre el que se encuentra el yacimiento y que ocultó la plataforma.

Además, hizo hincapié en que en el análisis del relleno de la actual estructura, se están hallando pintaderas, ídolos, molinos, morteros y otros elementos arqueo-lógicos de una calidad excepcional. A este respecto, indicó que “estos materiales nos están dando una información muy importante, para poder interpretar este espacio y otros graneros que existen en Gran Canaria”, remarcó. En este sentido, puso de relieve que se ha dado con numerosas piezas de cerámica pintada y de-corada de calidad, junto a elementos de vidrio volcánico de grandes dimensiones, que les llevan a plantearse nuevas hipótesis sobre el yacimiento.

Se han encontrado los empedrados originales del espacio religioso en los cinco sondeos realizados

La Dirección General de Patrimonio Cultural del Gobierno canario desarrolla una primera fase de prospecciones con sondeos arqueológicos en el antiguo convento dominico de San Pedro, en Hermigua (La Gomera) para recuperar los valores históricos-patrimoniales de este espacio eclesiástico y garantizar su correcta protección y conservación. La investigación ha sacado a la luz nuevos elementos y espacios en buen estado de conservación que están siendo estudiados por un equipo de la empresa especializada Tibicena.

Aunque la isla de La Gomera cuenta con un legado patrimonial de gran riqueza, el conocimiento acerca del periodo tanto preeuropeo como de las etapas inmediatamente posteriores es aún escaso. Con esta intervención arqueológica se pone el foco en un inmueble que fue clave para el desarrollo del municipio de Hermigua y de la isla en general .

De hecho, la importancia del convento va más allá de su aportación a la historia religiosa de Canarias puesto que este enclave se convirtió también en el eje cultural de la isla desde su creación a principios del siglo XVII hasta el siglo XIX, que cerró definitivamente sus puertas y pasó a manos privadas.

La directora general de Patrimonio Cultural, Nona Perera, explica que este proyecto “parte de la iniciativa de Emilio Trujillo, vecino de Hermigua y propietario de parte del área conventual”. Gracias a su interés por rescatar la historia del municipio, “se han podido localizar diferentes áreas al aire libre que se complementan con los espacios conservados doscientos años después de las desamortizaciones”, sostiene.

Cabe recordar que este convento preserva restos originales e intactos pero la ruina progresiva del conjunto ha hecho que hoy en día el complejo arquitectónico aparezca en algunas zonas totalmente devastado y en un continuo deterioro, “corriendo el riesgo de desaparecer por completo”, asegura Octavio Rodríguez, arqueólogo.

La intervención propuesta estaba encaminada a generar una primera evaluación del solar existente, conocer el alcance físico y de preservación de los restos arqueológicos que permanecían ocultos en el subsuelo.

Ahora bien, “antes de excavar se hizo una investigación bibliográfica para delimitar la realización de los sondeos en los lugares que podrían ser más fértiles. Además, las fuentes orales han sido imprescindibles para tratar de localizar algunos de estos espacios que no se veían a simple vista”, aclara Rodríguez.

Con la documentación previa, se señalaron los lugares que eran más propicios para empezar los trabajos, “en este caso se plantearon cinco sondeos y en todos los niveles aparecieron empedrados originales”, adelanta Robert Gómes, arqueólogo.

En cuanto a materiales, “lo más relevante ha sido el hallazgo de un capitel que parece ser de la época en la que estaba funcionando el convento porque coincide con los que se conservan todavía en otras zonas del solar”, subraya Gómes, “estamos estudiándolo”.

Los resultados obtenidos permiten plantear nuevas excavaciones en extensión en las áreas con mayor potencialidad arqueológica para hacer visible y comprensible los vestigios preservados y recuperar así otros elementos que revelen información de la vida de este emblemático conjunto religioso.

Las canteras de molinos indican que la actividad agrícola pudo ser más importante y extendida en el territorio insular de lo admitido hasta la fecha

La Dirección General de Patrimonio Cultural, a través del ICDC, ha realizado un estudio que ha tenido como objetivo confirmar la existencia de un área de producción guanche de molinos rotatorios fuera del ámbito de Las Cañadas del Teide. La investigación, a cargo de PRORED, ha localizado, documentado y analizado una cantera-taller, que nos informa de que estamos ante una área de producción de molinos circulares guanches en la zona del sur de Tenerife.

La existencia de canteras de molinos es un indicio de que la actividad agrícola guanche pudo ser más importante y extendida en el territorio insular de lo admitido hasta la fecha. La zona arqueológica está conformada por un conjunto de estructuras y zonas de aprovisionamiento de materia prima con restos que representan diversas fases de la cadena operativa ligada a la elaboración de piezas de molturación en roca vacuolar. También se ha realizado la primera fase de excavación arqueológica en una estructura de superficie o hábitat en cabaña guanche. En lo que se refiere de manera general al sur de Tenerife, existen exiguas intervenciones en este tipo de yacimientos, a lo que hay que aunar que salvo casos puntuales no se han desarrollado excavaciones con una metodología arqueológica renovada en este tipo de construcciones. Esta ausencia de datos dificulta la posibilidad de hacer análisis comparativos en profundidad, y entender por tanto de manera amplia el modelo de poblamiento guanche en la zona sur, que va más allá del hábitat en cuevas.

En relación a este estudio, la directora general de Patrimonio Cultural, Nona Perera, apunta que «los trabajos realizados en esta nueva y única cantera-taller documentada fuera de la alta montaña de Tenerife y la excavación arqueológica de una de las estructuras habitacionales de esta importante zona del sur, nos permitirá analizar mejor los poblados guanches, el modelo de ocupación y la movilidad en el territorio. En definitiva, con este tipo de estudios podremos conocer mejor los cambios sociales y económicos que se produjeron en la sociedad guanche antes de la conquista de Tenerife».

Resultados obtenidos

Tras la revisión de los datos recogidos en las prospecciones e intervenciones arqueológicas realizadas en 2004, 2008 y 2018, y el reciente trabajo de documentación en campo, han permitido la localización de trece elementos de molturación abandonados en diferentes fases de elaboración. También aparecen estructuras asociadas a dicha actividad, talleres en muy mal estado de conservación debido a las alteraciones que ha tenido este territorio.

A estos hallazgos hay que sumar la localización de varios instrumentos de roca compacta, de gran formato, relacionados con el trabajo de los molinos de mano. La existencia de estos instrumentos, catalogados como picos dada su morfología, indican claramente que esta zona no solo estaría asociada a la captación de recursos sino también al trabajo de rocas vesiculares o porosas y, por lo tanto, estaríamos ante un área cantera-taller, muy similar a las descritas para las Cañadas del Teide en el contexto de los proyectos dirigidos por la Dra. Matilde Arnay de la Rosa de la Universidad de La Laguna.

Uno de los aspectos significativos del trabajo era obtener un mayor conocimiento sobre la tipología y funcionalidad de los objetos líticos localizados en superficie. Por un lado, se han localizado útiles asociados a las canteras-taller, como pueden ser los picos, y a su vez, también se registran útiles asociados a contextos habitacionales, adscritos a actividades cotidianas/domésticas, a partir de la excavación de una estructura o cabaña próxima a la cantera. Este primer contacto con el registro lítico de esta zona de Tenerife parece señalar que en esta área existió una alta ocupación humana, algo que parece corroborar algunos yacimientos registrados en el entorno, como cuevas, cabañas o manifestaciones rupestres.

Con este trabajo, también se ha procedido a realizar el análisis de fluorescencia de rayos x que ha permitido conocer la composición química de la materia prima de varios conos volcánicos en el ámbito de Las Cañadas del Teide y de Los Riscos de Ifara. La comparación de los resultados permite establecer patrones de movilidad entre distintos ámbitos geográficos y tipos de asentamientos.

Hasta ahora, la visión que se tenía del papel de la agricultura dentro de la economía guanche era de carácter complementario respecto al pastoreo de ganado menor, considerada la principal actividad productiva en el contexto insular. A su vez, la documentación nos revela una información muy exigua sobre la agricultura guanche, indicándonos que la preferencia para el cultivo eran las zonas de medianía, de mediana altitud o incluso cercanas a la cumbre, donde la captación de humedad fuera suficiente. No obstante, no conocemos aún con rigurosidad el grado y las formas de integración de ambas actividades en el territorio.

El Ayuntamiento de Guía destina más de medio millón de euros a la mejora y protección de los yacimientos arqueológicos y el patrimonio histórico

Las actuaciones se centran en el Cenobio de Valerón, el Tagoror del Gallego y el Pico de La Atalaya

El Ayuntamiento de Guía destina más de medio millón de euros a la mejora del patrimonio y los yacimientos arqueológicos del municipio a través de diferentes proyectos con fondos procedentes del Cabildo de Gran Canaria a través de la Consejería de Patrimonio Histórico.

Las actuaciones que se están ejecutando actualmente en el Cenobio de Valerón, dotadas con 300.000 euros, y los nuevos proyectos para el Tagoror del Gallego y el Pico de La Atalaya, para los cuales el Cabildo aprobó en pleno la pasada semana una subvención de 175.000 euros, forman parte de las principales intervenciones incluidas en el programa de acciones para la mejora, protección y recuperación de estos espacios de alto valor patrimonial. A éstas se suman, además, otras dos subvenciones, de 20.000 euros cada una, concedidas por el Cabildo grancanario destinadas también al Cenobio de Valerón.

Según explica la concejala de Cultura, Sibisse Sosa, a comienzos de este año por parte del Ayuntamiento se trasladó a Patrimonio Histórico del Cabildo la necesidad de acometer un proyecto integral en el Pico de La Atalaya con diferentes intervenciones planificadas para la conservación, reparación y puesta en valor del almogarén y de los valores naturales y paisajísticos de este enclave. Para ello se trabajó conjuntamente con la oficina técnica municipal y se presentó una memoria presupuestada en 74.600 euros que acaba de ser aprobada por el pleno del Cabildo.

En ella se propone la señalización del camino en sus dos extremos, la balización del mismo y la colocación de varios puntos de información para realzar sus valores geológicos, paisajísticos y de flora y fauna. Igualmente se pretende instalar un punto de información en la Cueva de Samsó, lugar de extracción histórica de picón para el drenaje de los cultivos de exportación.

En las cuevas artificiales que existen en la cima se procederá a la instalación de un vallado de madera exterior que impida el acceso y, también, a la colocación de un punto de información para el conocimiento de sus usos prehistóricos e históricos.

La responsable municipal de Cultura informa asimismo que el pasado año se realizó un estudio del Tagoror de manera que se pudiera conectar con el otro gran yacimiento, el Cenobio de Valerón, en una ruta circular. A la luz de ese documento se elaboró una memoria valorada por la oficina técnica y se ha solicitado una subvención a Patrimonio Histórico del Cabildo por importe de 100.545 euros. Esto permitirá recuperar los dos accesos, tanto desde el propio Cenobio como desde el punto limpio, musealizando la zona con paneles informativos, señalética y bancos de descanso a lo largo del recorrido.

La alcaldesa de Agaete, María del Carmen Rosario, ha visitado el Parque Arqueológico de Maipés de Agaete, un yacimiento aborigen que mejorará sus instalaciones gracias a una inversión de 84.642 euros

El proyecto denominado 'Actuaciones de mejora en el B.I.C. Maipés de Agaete' ha sido financiado por la consejería de Patrimonio del Cabildo de Gran Canaria

Se presta especial atención a trabajos fundamentales para la mejora del uso, como son la recepción, las instalaciones y los aseos, que han sido prioritarios en el desarrollo del proyecto, en obras que estarán supervisadas por expertos en arqueología para garantizar la protección de los bienes del parque.

Las mejoras abordan la sustitución el portón de acceso por otro corredero, evitando así los cierres accidentales de las hojas abatibles. También se amplía la recepción, pequeña e incómoda hasta el momento, para dotarla de más espacio, con 14 metros cuadrados que incluyen un pequeño almacén de unos 2 metros cuadrados y una sala de exposición y venta de souvenirs.

Además, habrá mejoras en la red de suministro de agua, con una tubería de suministro para disponer de agua para labores de mantenimiento, en una instalación que quedará soterrada bajo las pasarelas.


Los aseos se adaptarán y se mejorará la señalética, además de otros trabajos en acabados y alicatados.

El proyecto también sumará puntos de sombra frente a la recepción, para una zona de estancia y espera más cómoda y acondicionada con un banco y una mesa de interpretación. Con este punto de sombra se busca crear una zona de espera resguardada del sol para acoger a los grupos en los momentos tanto de entrada como de salida, durante el tiempo donde se gestionan los tickets o se espera el transporte.

El plazo de ejecución de las obras se estima en cuatro meses.

Se trata de trabajos específicos y perimetrados espacialmente, que no afectan a las instalaciones existentes ni a los bienes patrimoniales que alberga este yacimiento.

Tumbas de lava, BIC desde 1974

En 1974 este yacimiento en Agaete fue declarado Bien de Interés Cultural por su gran valor arqueológico, al que se suma la colada volcánica y su geología única, y la flora y fauna asociada a este espacio.

En el yacimiento arqueológico del Maipés de Agaete hay cerca de 700 tumbas de antiguos canarios, realizadas hace más de 1.300 años en el malpaís y con material de la colada volcánica. El parque tiene más de un kilómetro de superficie, lo que lo convierte en uno de los espacios funerarios de la cultura aborigen más importantes de Canarias.

El Maipés de Agaete ofrece visitas libres y guiadas con profesionales formados en esta materia, además de paneles explicativos, maquetas y aplicaciones multimedia en varios idiomas que complementan el recorrido con información del lugar.

El parque arqueológico es accesible para personas con movilidad reducida, con un recorrido de senderos habilitados.

Se han inventariado un total de 97 enclaves entre el entorno del filo de Siete Cañadas y Montaña Blanca-Montaña Negra

El proyecto pretende completar los inventarios arqueológicos y etnográficos del Parque Nacional de El Teide

La Dirección General de Patrimonio Cultural, en colaboración con la Universidad de La Laguna (ULL), ha realizado varias prospecciones arqueológicas de carácter superficial en el Parque Nacional del Teide con el objetivo de inventariar nuevos yacimientos arqueológicos y enclaves etnográficos. En esta anualidad, el equipo de PRORED, empresa que dirige el proyecto, ha localizado 64 enclaves guanches y 33 bienes etnográficos entre Cañada Diego Hernández y La Grieta, en el entorno del filo de Siete Cañadas, y Montaña Negra y Montaña Blanca.

Estas actuaciones arqueológicas suponen el reconocimiento en superficie de los elementos generados por la sociedad guanche y las nuevas formas de vida tras la conquista de Tenerife en 1496. “Los inventarios nos ayudan a entender cómo se estructuraba territorialmente, en época aborigen, la alta montaña de la isla”, explica Hacomar Ruíz, arqueólogo.

Ahora bien, “en el ámbito de Canarias es fácil reconocer las particularidades que posee el Parque Nacional de El Teide, por sus características climatológicas y orográficas, pero con eso no es suficiente”, recalca la directora general de Patrimonio Cultural, Nona Perera. “Además de reconocerlo, tenemos que conocerlo, saber de su pasado” y la única forma de poder acceder a ese conocimiento “es investigando por medio del método arqueológico para poder escribir la historia del Teide, difundirla y que deje de ser invisible”, aclara.

En lo que respecta a los bienes arqueológicos, “destacan principalmente las áreas con restos en superficie”, especifica Ruiz. Se trata de “concentraciones de cerámica aborigen, obsidiana y lascas de roca compacta. No obstante, hay que destacar también la presencia de estructuras aborígenes localizadas en las zonas prospectadas, hasta un total de diecinueve, algunas de especial interés y en muy buen estado de conservación”, asegura.

De hecho, “algunas de las unidades localizadas en Montaña Negra podrían ser fruto de una excavación arqueológica, especialmente porque son estructuras de grandes dimensiones y parece que en su interior conservan un paquete sedimentario realmente importante”, adelanta el arqueólogo.

En esta campaña, la elección de las zonas prospectadas ha sido motivada por el interés que suscita la relación del circo de Las Cañadas con la comarca sureste de Tenerife y porque el estudio de este entorno es clave para comprender las rutas usadas por la sociedad guanche en su acceso a Las Cañadas por la cara norte de la isla.

Actuaciones desde 2014

En el marco de las actuaciones en el contexto del Parque Nacional del Teide, se ha acometido en los últimos años un programa de prospecciones y excavaciones arqueológicas a fin de profundizar en el conocimiento de la ocupación histórica de Las Cañadas, completar las cartas arqueológicas y etnográficas así como disponer, además, de un recurso eficaz para la gestión y difusión de su patrimonio cultural.

Esta nueva campaña supone dar continuidad a los trabajos arqueológicos iniciados en 2014 con el proyecto de la Red de Parques Nacionales “Estudios sobre el Patrimonio Arqueológico del Parque Nacional del Teide” y la investigación “Guanches y europeos en Las Cañadas del Teide. Ocupación, producción y comunicación”de la Dra. Matilde Arnay de la Rosa, concedido por el Ministerio de Economía y Competitividad.

Además, las investigaciones arqueológicas realizadas en Las Cañadas del Teide, desde la década de los cincuenta del siglo pasado hasta la actualidad, han demostrado la alta intensidad de la ocupación guanche, generando un variado repertorio de yacimientos arqueológicos.

Según las dataciones absolutas obtenidas por carbono 14, la sociedad aborigen ocupó las cumbres de Tenerife desde, al menos, el siglo V d. C. hasta bien entrado el XVII. En el caso específico de Las Cañadas, se sabe que vivían allí de forma estacional y aprovechando los variados recursos que ofrecía este medio, construyeron cabañas y refugios, y utilizaban cuevas para resguardarse.

Con este proyecto se han realizado prospecciones en los Roques Blancos, Cruz de Tea-Lomo de Chío, en Montaña de los Corrales, Cañada la Grieta, Angostura y el Tabonal Negro, así como otras actuaciones arqueológicas en distintas zonas del entorno de Las Cañadas del Teide.

El catedrático y Premio Canarias abre el primer ‘Taller internacional de historia y arqueología de Canarias y el Norte de África’

El Museo Arqueológico de Fuerteventura acoge las ponencias de veinticinco profesionales para confrontar las últimas investigaciones arqueológicas

La situación en la investigación arqueológica de Canarias ha cambiado mucho por la aplicación de nuevas metodologías o por las nuevas miradas que han permitido otras interpretaciones para entender el pasado aborigen del archipiélago y las relaciones entre estas comunidades con el Norte de África. Con este punto de partida, dio comienzo el I ‘Taller internacional de historia, arqueología y patrimonio arqueológico de Canarias y el Norte de África’ que reúne hasta este sábado a más de veinticinco profesionales en el Museo Arqueológico de Fuerteventura (Betancuria).

La apertura del taller contó con las intervenciones de Nona Perera, directora general de Patrimonio Cultural del Gobierno de Canarias, Rayco León, consejero de Cultura, Patrimonio Histórico e Innovación del Cabildo insular de Fuerteventura, y Elena María Pérez, profesora titular de la Universidad Europea de Canarias y coordinadora del taller.

León destacó que “Fuerteventura tiene una rica carta arqueológica y es fundamental que la investigación forme parte de la agenda del Cabildo y Gobierno de Canarias. Debemos agradecer el apoyo a través de un taller internacional que se concentra en el Museo Arqueológico de Fuerteventura para dar un impulso a la investigación y debatir sobre los retos fundamentales para que la arqueología pueda cerrar muchas de las incógnitas que tenemos sobre nuestro pasado”.

Por su parte, Nona Perera, insistió en que “el conocimiento más detallado que el alcanzado en la actualidad sobre el Norte de África resulta tan necesario como urgente porque significa acotar en espacio, tiempo y motivación las legendarias cuestiones que nos hacemos desde hace siglos: ¿de dónde?, ¿por qué? y ¿cuándo?”. A través de este encuentro entre profesionales de las islas, el continente europeo y africano se pretende fomentar nuevas “líneas de trabajo de interés común”.

En este sentido, Elena Pérez, coordinadora del encuentro y profesora titular de la Universidad Europea de Canarias, explicó que “el objetivo de este taller es compartir y reflexionar en un espacio donde mostrar las investigaciones, debatir y exponer problemas e inquietudes, así como discutir sobre las posibles soluciones en estos ámbitos; hablar de los fracasos y de los éxitos y proponer una ruta a seguir”.

La conferencia inaugural corrió a cargo de Antonio Tejera, catedrático de Historia y Arqueología de la Universidad de La Laguna, quien insistió en la necesidad “de revisar el conocimiento y repensar todo lo que se ha hecho arqueológicamente en los últimos cien años”. Y añadió que “visto el bagaje de lo excavado y los materiales que se conservan en nuestros museos, tenemos que hacer el esfuerzo de revisar y actualizar todo lo que está sin estudiar” desde los avances técnicos y científicos actuales.

En su charla, ‘Revivir el pasado y repensar el futuro: la arqueología canaria que conocí (entre 1970 y la actualidad)’, Tejera hizo un recorrido por los últimos cincuenta años dentro de este ámbito científico en el archipiélago y concluyó con que “mientras no seamos capaces de imbricar a la ciudadanía con el pasado, nuestro trabajo no tendrá sentido”.

A lo largo de las jornadas se debatirá sobre diferentes temáticas que podrán seguirse de forma presencial y en línea (https://cutt.ly/5Vc8GDF). En este sentido, la Mesa 1 trató sobre la “Arqueología de las poblaciones nativas de las Islas Canarias. Retos del presente y perspectivas de futuro” mientras que la Mesa 2, que empieza a partir de las 16:00 horas, estará centrada en las “Colonizaciones en el Magreb occidental. La perspectiva arqueológica de un gran reto histórico”.

Mañana, 23 de septiembre, a las 9:00 horas, continúa el taller con la Mesa 3 sobre “La investigación desde la arqueología colonial en el siglo XXI” y la última sección, la Mesa 4, dará comienzo a las 15:40 horas para hablar sobre las “Estrategias y limitaciones actuales para la gestión del patrimonio arqueológico en las Islas Canarias”.

Finalmente, la clausura del ‘Taller internacional de historia, arqueología y patrimonio arqueológico de Canarias y el Norte de África’ será el sábado 24 de septiembre en el Hotel Barceló Mar a las 10:30 horas con la mesa de conclusiones presentadas por el Comité Científico.